Fika, la pausa perfecta
Ya se cumple casi 1 mes desde que estoy en Estocolmo y ha sido una experiencia genial. Llegué en pleno invierno, una época no sólo fría sino que con muy cortas horas de luz, de verdad, el sol se pone a las 15.30. Por lo que podríamos decir que es una vida principalmente nocturna, aunque sean las 5 de la tarde la sensación es esa, al menos como latina. Puede haber -15°C afuera, esta ciudad no para. Me pregunto entonces ¿cómo lo hacen los suecos para mantener el buen ánimo y e